domingo, 10 de agosto de 2014

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¿Qué secretos encierran las Pirámides de Egipto?


Conoce las diferentes hipótesis sobre cómo se construyeron



Se sostienen muy diversas hipótesis acerca de cómo se construyeron las pirámides de Giza, con teorías que van desde los esclavos hasta seres de otro planeta. Muchos afirman que los egipcios tenían un tipo de tecnología que luego se perdió.

Algunos sustentan que a pesar de que la construcción era complicada, no era tan colosal como se imagina. Se dice que se tardó 23 años en construir la más grande, gracias al trabajo de  entre 20 mil y treinta mil esclavos. Dado que Notre Dame se hizo en 200 años, tampoco parece tanto tiempo. En el momento en que un hombre llegaba a ser faraón, creaba un comité para construir su pirámide, en el que había un capataz, un ingeniero y un arquitecto.

El concepto de esclavitud y servidumbre en el Antiguo Egipto era muy diferente del que se tuvo después, era más similar a un sistema feudal que a uno de esclavos. Los campesinos contratados para construir las pirámides estaban libres de impuestos y vivían en ciudades pirámide en las que tenían alojamiento, alimentos y ropa. Además trabajaban en turnos de tres meses, se les pagaba y comían carne regularmente. De hecho eran muy respetados por su trabajo. Sin embargo a pesar de los privilegios que poseían su trabajo era muy duro, muchos esqueletos presentaban signos de artritis y problemas varios en las vértebras inferiores.

De igual manera quedaban algunos misterios por resolver, se continúa investigando cómo se retiraban las piedras de las canteras. Los cinceles de cobre se utilizaban para las canteras de arenisca y caliza, aunque aún no se sabe a ciencia cierta que utilizaban para las piedras más duras. Se piensa que se utilizaban cañones de dolerita una piedra muy dura para romper las piedras como el granito. Después se arrastraban a través de  la fuerza humana o animal y se colocaban en gradas especialmente preparadas y lubricadas con aceite. Además se construían rampas para colocar los materiales en el lugar adecuado, hechas de ladrillos de barro y revestidas con virutas de yeso que endurecían la superficie.

Hay otra hipótesis más reciente acerca de cómo trasladaban los bloques de piedra que pesaban entre dos y sesenta toneladas. Físicos de la Fundación FOM y la Universidad de Amsterdam han descubierto cuál es el truco que utilizaban los egipcios. Las piedras que solían arrastrarse sobre una losa a la que se ataba una cuerda a modo de trineo, se transportaban por zonas donde se había humedecido la arena, lo que permitía un mejor deslizamiento. Los físicos colocaron una versión de laboratorio del trineo egipcio en una bandeja de arena. Con este ejemplo se determinó tanto la fuerza de tracción requerida, así como la rigidez de la arena en función de la cantidad de agua en la arena. De esta manera demostraron que la fuerza de tracción requerida disminuyó de manera proporcional a la rigidez de la arena. En efecto en una pintura de una de las paredes de la tumba de Djehutihotep, se muestra claramente a una persona parada en la parte delantera del trineo arrojando agua sobre la arena. 



Cuáles son los últimos hallazgos de los egiptólogos.


El Dr. Robert Schoch (Profesor de Geología de la Universidad de Boston, EE.UU.) y el egiptólogo John West, llegaron a la conclusión de que las profundas fisuras que se encuentran en la famosa Esfinge de Egipto no son producto de la erosión de arena y viento, sino de agua de lluvia y remontan una edad de 10.500 A.C. para esta estructura.
Entre 1995 y febrero de 1997, a través del uso de un sofisticado escáner se comprueba la existencia de una "cámara" bajo la pata derecha de la Esfinge. También se descubre un túnel que iba directo hacia la segunda Pirámide.


En 1983 el escritor y egiptólogo Ing. Robert Bauval (coautor de El Misterio de Orión y Guardián del Génesis respectivamente, y autor del libro La Cámara Secreta) informaba sobre la Teoría de la Correlación de Orión y la Pirámide de Kheops.
Anteriormente los Drs. Virginia Trimble y Alexander Badawi habían demostrado que el canal Sur de la Cámara del Rey estaba orientado hacia el Cinturón de Orión, el "alma" de Osiris.

En 1986 R. Bauval descubre que el Canal Sur de la Cámara de la Reina estaba orientado hacia la estrella Sirio, identificada como la hermana y esposa de Osiris, la diosa Isis, quien hizo su aparición en los cielos de este lugar hacia el 10.500 A.C., según los estudios astronómicos.

La relación entre las estrellas del Cinturón de Orión (Zeta, Epsilon y Delta Orionis) era evidente. Una conexión astronómica y estelar existía.
Bauval encontró además características similares entre las tres estrellas del Cinturón de Orión y las tres Pirámides.

Recientemente se llevó a cabo un hallazgo impresionante. En realidad el hallazgo no es nuevo, pero sí su difusión En 1907, el arqueólogo británico Cecil Mallaby Firth encontró una antigua tumba en uno de los cementerios de la ciudad de Nubia. Una tumba catalogada como la 96 del cementerio 102. En esta sepultura, además de los restos de un hombre, se encontraron también algunos objetos como parte del ajuar del difunto. Entre ellos, destaca un huevo de avestruz con unos signos extraños y, a la vez, familiares. Dichos restos humanos fueron datados, aproximadamente, alrededor del año 4000-3500 a.C. Es decir, dicho objeto (un huevo de avestruz con algunos dibujos decorativos) tendría una edad aproximada de 6000 años. 


Según J.J. Benitez y M.J. Delgado en un documental de la serie Planeta Encantado de RTVE, el huevo sería una especie de oopart en el que la cronología oficial no correspondería con las imágenes de este pues, según ambos investigadores, no hay lugar a dudas de que las formas geométricas que aparecen en él, son las pirámides de la meseta de Giza  y, la figura serpenteante, representaría el curso del rio Nilo a su paso por la misma. Esto nos lleva inevitablemente a retrasar la fecha de la construcción de los monumentos más famosos del mundo en varios miles de años.

Es evidente que esta increíble y avanzada civilización continuará asombrándonos hasta el final de los tiempos.


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